Jugar este juego es cómo disfrutar de un buen relato clásico en un día de lluvia, sentada en el sillón con una taza de té (o café) junto a la ventana.
Tiene ese toque elegante que ya no se encuentra fácilmente. Tiene lírica. Y también un sistema de juego dinámico muy agradable.
¡Y la música!
Hay dos cosas que marcan tu estilo personal y que disfruto en tus juegos: que siempre me sorprendes con un toque diferente, único, y que eliges la música perfecta para la ocasión.