El juego es muy divertido, me han gustado mucho las referencias (sobre todo al pastafarismo), pero un fallo en el último minijuego lo ha echado todo a perder. La narrativa es flojilla pero no deja de ser divertido. Algunos minijuegos funcionaban un poco raros (¿alguien ha conseguido beberse una cerveza?) y el último directamente era injugable por un fallo del propio minijuego. A pesar de ello sigue siendo un buen juego aunque debe mejorar.