Juego simple pero muy resultón que define una mecánica y centra todo el juego en torno a ella. Presentándola poco a poco para asentarla, presentándola en distintas situaciones, incrementando la dificultad. Además da un giro al típico juego de duelo, en el que no sólo importan los reflejos si no también el posicionamiento, el "tembleque", el acercar la mano al revólver. El "no hay vuelta atrás". Un sistema muy bueno para crear tensión que refleja muy bien los duelos del lejano oeste. Y la historia no está mal tampoco.
¡Bien hecho!