Jajajaja... Lo titulamos "The Citrics" porque la boda es entre una naranja y un limón... y bueno, si, las familias se llevan mal, al estilo los Montesco y los Capuleto de Romeo y Julieta.
¡La idea de que los trabajadores están marginados se me hace muy graciosa! Pero quiero creer que les pagan un sueldo decente, no de mileurista.
Excepto a la piña. La piña es el alcalde del pueblo. Seguro que desfalca dinero.