Un juego muy atmosférico, y para estar hecho en media hora el resultado es técnicamente sofisticado, con esas vistas múltiples. Tuve que jugarlo un par de veces hasta entenderlo del todo, pero con este tiempo de desarrollo no se puede pedir mucho más. Enhorabuena!

buen juego de Fran Kane. Un suplicio jugarlo en iPad pero al final lo he logrado. Entiendo que para realizar algo como este juego hay que tener una maestría en Bitsy. Es un juego para jugar mientras te tomas un café caliente estas tardes de otoño, por lo oscuro, helado y corto de la fabula que de lo contrario te deja helado.

El juego, como promete, nos relata una fábula del folclore de esa zona, un poco tétrica y sin moraleja. Un juego muy directo, que no siendo sangriento, crea un ambiente bastante opresivo, más aún viendo el final resultante.

-Jade.

Una propuesta minimalista pero muy potente, la escritura y la ejecución es magnífica. Enhorabuena. 

Tremenda pequeña pesadilla, leyenda del folklore patrio convertida en viñeta de Bitsy.

Una especialidad del autor, que le permite parir estas pequeñas maravillas en muy poquito de tiempo.

La interacción es muy sencilla. algo normal para una Petite Morte, pero en lo que destaca este juego es la representación gráfica de la escena, quizás inspirado en la experiencia del autor con los cómics y los juegos de rol con diversos bocadillos ilustrativos. Está el área de juego habitual en bitsy, a la que acompañan 2 pequeñas ventanas que muestran diversas perspectivas de lo que está ocurriendo, del fantasma?, y de la pobre niña. Me parece una innovación notable dentro de Bitsy.

Para terminar, el giro, el autor ha actualizado el cuento añadiendo varias capas de actualidad social (muy ligero), con un resultado muy ameno y escalofriante. La tradición y la contemporaneidad de las redes sociales, en una forma que ya quisiesen las pelícuas que traen los tropos de terror a la actualidad…

Creado en media hora. Un juego que demuestra lo que ya decía Astrud: lo antiguo es lo más moderno. Aspectos geniales: el interfaz y la transición de la cama al monstruo escondido en la oscuridad, el plano enfocado en el ojo, la crueldad del lenguaje del folclore, aquí rescatado con humor y frescura. Una entrada memorable.